La reina del Carnaval de Barranquilla, Valeria Abuchaibe, lució despampanante en la Gran Parada de Comparsas, un tradicional desfile que sirve para que quienes participan den rienda suelta a la imaginación y descresten al público.
Valeria hizo lo propio con un vestido bautizado ‘Vuelo de Fantasía’, una obra de arte diseñada por la reconocida diseñadora Amalín de Hazbún para que la reina rindiera tributo al colibrí, un ave que hace parte del paisaje Caribe.
Así se puso a tono con el motivo del desfile: rendirle homenaje a las aves del Caribe y recordar la importancia de cuidar el medio ambiente para seguir contemplándolas.
La reina iba respaldada por una afinada banda de músico que interpretaba aires carnavaleros, respaldados por una numerosa comitiva real que bailaba al son de la música como lo hacía Valeria.
Los movimientos de ella eran diagonales, para tener contacto cercano con el público que la aclamaba y la aplaudía a su paso. La gente seguía su ritmo con las palmas y agitando pañuelos. Todos quedaron encantados.
Se trató de un desfile en el que abundaron los colores brillantes, los trajes con lentejuelas. Todo inició con el disfraz colectivo Las Diosas del Carnaval, un grupo de mujeres despampanantes vestidas como garotas a bordo de una carroza.
Detrás de ellas, 600 jóvenes de las Escuelas Distritales de Arte desfilaron con una gigantesca pancarta en la que se le leía #NoNosVamosADejar, el mensaje con el que la Alcaldía pretende mantener viva la llama de la esperanza luego del atentado a la estación de policía San José.
Con ellos iba el secretario de Cultura, Patrimonio y Turismo, Juan José Jaramillo, quien vigilaba que ningún detalle suelto afeara la presentación.
Muy cerca de allí hizo su aparición el Rey Momo, Ricardo Sierra, con un vestido por medio del cual le rindió homenaje a los diablos arlequines de Sabanalarga.
Sin duda alguna, la Gran Parada de Comparsas 2018 quedará marcada por su singular colorido y la creatividad de quienes diseñaron los vestidos y montaron las coreografías.