A pesar de su extensa historia, la apariencia de Rostov del Don es la de una ciudad joven y moderna. Sus calles tienen nombres tan románticos como Armoniosa, Creativa y Afortunada y, en ellas, uno puede encontrar monumentos de lo más inusual; como los dedicados al caño de una fuente, o a un lector de periódicos.
Gracias al río Don, la ciudad goza de tranquilas y pintorescas playas de arena, así como de una cocina única, con sabrosos platos de pescado y de cangrejo.
Rostov del Don está situada a unos mil kilómetros al sureste de Moscú, y es un importante centro cultural y de transportes del sur de Rusia.
*Con información de Fifa.com