El ciclista italiano Elia Viviani, primero en la línea de meta este lunes en Orbetello, fue descalificado por una maniobra irregular en el esprint final, por lo que los comisarios designaron al colombiano Fernando Gaviria como vencedor de la etapa.
Gaviria, que había acabado segundo en la línea de meta, por detrás del campeón de Italia, consigue de esta manera su primer triunfo en la presente edición de la carrera rosa, que sigue teniendo al esloveno Primoz Roglic como líder.
Los comisarios castigaron a Viviani por haberse desviado de su trayectoria en pleno esprint, lo que impidió a otro corredor (su compatriota Moschetti) disputar la etapa.
“El jurado revisó el video del esprint y decidió descalificar a Elia Viviani. El ganador es Fernando Gaviria”, anunciaron los organizadores en las redes sociales.
“Es él el vencedor. Hoy yo fui segundo”, declaró pacíficamente el antioqueño, que no quiso pronunciarse sobre la maniobra de su excompañero de equipo, sobre todo, porque en ningún momento fue perjudicado en un esprint que se disputó con un fuerte viento de cara.
“Lo siento por Elia, porque es un gran corredor y un esprinter muy correcto”, insistió el colombiano del UAE Emirates.
Tras esta decisión, el francés Arnaud Démare fue segundo en la etapa y el alemán Pascal Ackermann, vencedor de la etapa el domingo, tercero.
El colombiano, de 24 años, cuenta ya con 5 etapas en el Giro, carrera en la que participa por segunda vez en su carrera. En la primera, en 2017, ganó cuatro etapas.
Esta lucha entre los velocistas por el triunfo parcial no afectó para nada a la clasificación general individual, en la que el esloveno Primoz Roglic (Jumbo) conserva la maglia rosa de líder tras una jornada en la que el pelotón rodó prácticamente agrupado durante los 220 km de recorrido y en la que se produjeron varias caídas.
– El viento rompe el pelotón –
Un sólo corredor, el japonés Sho Hatsuyama, intentó una fuga al inicio de la etapa, sin provocar reacción alguna del pelotón, que le cazó después de 144 km de escapada.
“Con un solo corredor en la escapada, la jornada se ha hecho muy larga”, admitió Roglic. “Pero eso también me ha permitido disfrutar un poco más de la maglia rosa”.
En el final, bordeando el mar Adriático, el pelotón se rompió en varios grupos como consecuencia de las caídas provocadas por le nerviosismo de los corredores ante el fuerte viento que soplaba en el tramo final.
“A mi no me asustó porque somos un equipo holandés y sabemos como lidiar con el viento”, matizó el líder.
El británico Tao Geoghegan Hart, el más destacado entre los rezagados, cruzó la meta con retraso. También el ecuatoriano Richard Carapaz perdió una cincuentena de segundos.
El martes se disputará la 4ª etapa, una de las más largas de la presente edición del Giro, entre Orbetello y Frascati, al sur de Roma. El recorrido, rompepiernas, rodea la capital italiana y concluye con una subida suave (con un desnivel del 4 al 5% de media) en los dos últimos kilómetros.