Laura Jaramillo, exmujer del futbolista palmarino Michael Ortega, habló este sábado por primera vez sobre la ruptura con el volante atlanticense y cómo Andrea Valdiri se metió en su relación.
Las revelaciones las hizo en el programa La Red, de Caracol Televisión, donde hace 15 días Valdiri había dicho que su relación con Ortega terminó porque Jaramillo no le dio el divorcio y la familia del futbolista no la aceptaba como su pareja.
“Si ella (Valdiri) quiere conseguir algo en su vida, que lo haga con mérito propios y no busque llevarse a personas, que no tienen nada que ver, por delante. Decir que su relación se acabó porque no le firmé el divorcio y que su mamá y su hermana no lo aceptaban es una farsa”, dijo Jaramillo.
El amplio segmento que el programa de chismes le dedicó a este triángulo amoroso empezó con Jaramillo definiendo qué es una ‘quita maridos’
“Quita maridos es una mujer sin pudor, sin escrúpulos para hacer daño, que va detrás de lo que ella quiere sin importarle nada más”, explicó.
Luego explicó cómo fue el inicio de su separación con Ortega.
“Todo comenzó hace dos años. Yo estoy con Michael desde los 17, vivimos en Alemania, nos casamos en Cartagena. Tuvimos altos y bajos, como toda relación. Él estaba en Junior y aunque le quedaban 6 meses de contrato, el equipo desistió de contar con él”.
“Pensamos que íbamos a encontrar un equipo en Colombia, pero Dios nos bendijo con un equipo en Brasil y nos fuimos”, contó.
Lauro dijo que en ese país fungió como guía turística de los familiares de Ortega y los suyos, y que en medio de esas salidas él se veía con Valdiri.
“Llegó su familia de visita, todo estaba super bien. Sin embargo, hubo unos días en que él presionó para que yo me fuera. Le dijo a su hermana (Kathe Ortega) que nos fuéramos a Río de Janeiro, pero salía muy costoso y nos fuimos a unos tour en Santa Catalina”.
“En otra ocasión llegó mi tía, el 9 de julio de 2016, y fue lo mismo. Yo salía con ella y al yo no estar en casa todo el tiempo ellos aprovechaban”.
“El día que mi tía dice: el viernes nos vamos, ahí empieza todo. Michael se estresó porque no tenía tiempo para ella. Me dijo: vete para Colombia, tómate un tiempo, me insistía y me insistía y yo decía que no”.
“Entonces me dijo: es que yo necesito que tú te vayas porque yo necesito un tiempo. ¿Necesitas un tiempo para qué, Michael? ¿Vos me estás hablando en serio? No necesito tiempo para saber que amo a mi esposo, estamos casados, tenemos dos hijos. Y me dio: necesito respirar, déjame respirar, déjame tranquilo un tiempo”.
Laura Jaramilló dijo que el 5 de agosto de ese año se regresó a Colombia con su tía y sus hijos, pero dejó en Brasil parte de su ropa y de la de los niños.
“Días después me escribe: tú te quedas en Colombia, no regreses, no tienes nada que hacer aquí, no quiero que vuelvas”.
Sobre las razones que lo habrían lanzado a los brazos de Valdiri, Jaramillo explicó:
“Soy una mujer tranquila, no soy de rumba, me dedicaba a atenderlo, a ser madre ejemplar, a mi deporte. Tal vez eso lo aburrió, pero que se le haya acabado el amor no creo. Él lloraba, me decía que me amaba, que yo era la mamá de sus hijos”.
“Encontró en ella una persona que compartía sus gustos, la rumba, que es una mujer alegre, el trago, el alboroto, la farándula. Mi vida son mis hijos y mi hogar”.
El 21 de agosto, dijo Laura, volvió a Brasil a luchar por su matrimonio, pero lo que encontró fue rechazo.
“Durante esos tres meses me dio muy mal trato sicológico, me humilló, me decía malas palabras. No aguanté más, me regresé a Colombia. Al día siguiente, abren la puerta, me asomo y lo vi con una maleta. Subió a jugar con los niños y luego vino a hablar conmigo”.
Según Laura, Michael lo buscó para que volvieran.
“Yo lo amaba con todas mis fuerzas. Unos días intentaba, otros días se perdía. Llegaba en un carro, me decía que era alquilado. Se quedaba en un apartamento y me decía que un amigo se lo había prestado”.
Una tarde, Laura recibió una llamada de Ortega en la que le decía que la abogada la estaba esperando para firmar el divorcio,
“Llegué a mi casa y empecé a llorar. Él me vio y me dijo: yo a ti te amo, tú eres la mamá de mis hijos, si es de volvernos a casar nos volvemos a casar. Listo, yo te lo firmo, pero prométeme que no me vas a dejar sola”.
Laura aseguró que hasta ese momento no sabía de la existencia de Andra Valdiri, hasta que una amiga la llamó y le dijo que Michael tenía novia y que vivía con ella.
“Empecé a mirar en redes sociales y encontré todo. Ella se tomó una foto en mi apartamento, lo sé porque en el techo hay un diseño de luces. Eso fue el 17 de agosto, cuando yo estaba en Colombia porque él me lo había pedido. Además se tomó un foto y puso que era en Río de Janeiro, pero era Florianópolis, donde vivíamos”
Dos semanas -contó Laura- se aguantó sin decirle nada a Michael. Hasta que le envió todas las evidencias de su infidelidad.
“Me dijo que si sabía eso por qué no le firmé el divorcio desde un principio. No se lo firmé porque iba a dejar a mis hijos sin nada”.
Laura contó además que Michael la quiso chantajear: “o me das el divorcio o subo la foto con ella”.
Después de eso, aparecieron cuentas falsas en Instagram en las que, según Laura, le contaban más cosas acerca de Valdiri y Ortega. Hasta que sacó un comunicado en el que explicaba que ya no tenían nada y que le deseaba lo mejor a la nueva pareja,
“Ella (Valdiri) se atacó, dijo que Michael me dejó porque le pegué cachos, eso no es así”.
Jaramillo aprovechó una vez más para aclarar un supuesto video erótico en el que aparece. “No soy la del video”, dijo.
Su intervención terminó con otra revelación: Ortega, recientemente, le pidió perdón.
“Ahora que terminó con Andrea, volvió con el rabo entre las piernas, diciéndome que se quiere reivindicar, que lo perdone”.
“Yo lo perdoné y solo le dije que siempre puede contar con su familia, que son sus hijos”.